Hay una diferencia vital entre sentir felicidad por algo, o sentirse, ser y estar Libre. La felicidad se termina cuando termina lo que te hace feliz. La libertad del espíritu en cambio, es un Estado interior permanente y que a pesar de los cambios, dificultades e incluso tragedias, no se apaga ni se termina, sino que te protege, fortalece y eleva».
Mujer y varón por igual
Todo Ser Humano nace en La Gracia: hombre o mujer sin distinción. Y esto es por Los Hechos de...
0 comentarios